Diez detenidos con armas y drogas

Tres armas calibre 22, 32 y una réplica 9mm se hallaron en una de las casas. También una moto en la que malvivientes habrían escapado a los tiros de la Policía.


Centenario > La Policía detuvo a diez personas –entre ellos tres menores de edad- en cinco allanamientos efectuados en el barrio Villa Obrera de Centenario, donde se encontraron armas y drogas en viviendas habitadas por supuestos delincuentes.
Los procedimientos fueron ordenados por el titular del Juzgado de Instrucción Nº3, Marcelo Muñoz, y se realizaron con la colaboración de la Policía Metropolitana y Comisaría Quinta, y Brigada de Investigaciones ya que días atrás los delincuentes se habían enfrentado con los uniformados, por denuncias de vecinos por una seguidilla de robos y amenazas.
Al cierre de esta edición los menores recuperaron la libertad, mientras que los otros demorados estaban a disposición de la Justicia, según se informó.
El jefe de Delitos, comisario mayor Gerardo Escobar, confirmó ayer a la prensa que en los allanamientos se encontró droga como marihuana y tres armas de fuego, una de ellas una réplica de 9mm. Se intentaba establecer ayer si alguna de ellas tenía relación con robos y atracos en la localidad.
En los allanamientos los uniformados encontraron cigarrillos de marihuana, tres plantines de esa droga y algunas bolsitas que se investigan si eran para uso personal o comercialización.
También los policías secuestraron una moto en la que días atrás delincuentes se habrían tiroteado con los uniformados, luego de denunciar un intento de robo en el bombeo de la planta de agua de la Municipalidad.
La relación entre vecinos del barrio Villa Obrera, los delincuentes y la intervención policial no es la mejor. Este último fin de semana se desnudaron situaciones difíciles para los vecinos, que permanecen de rehenes de grupos delictivos.

Peligro nocturno
“No se puede salir de noche, les roban a la gente, les cobran peaje para pasar de calle y los amenazan cuando viene la Policía les tiran piedras a los patrulleros y les disparan. Se están pasando de vuelta los pibes y no los pueden tocar porque son menores. Mucha gente se quiere ir del barrio”, dijo un vecino que prefirió no dar su nombre por seguridad.
El conflicto viene desde el 27 de noviembre pasado, cuando vecinos en forma anónima llamaron a la Policía por amenazas y robos en el sector. En un procedimiento un policía terminó herido en el cráneo y hospitalizado.
Al día siguiente, se produjo un hecho similar y la intervención de la Policía generó alivio para los vecinos pero euforia en los delincuentes, según informaron fuentes consultadas por este diario.

fuentes - http://www.lmneuquen.com.ar/noticias/2010/12/3/91676.php